Acción fatal: infortunada jugada le impide a exjugador de la U romper maleficio que se extiende por dos décadas

Rodrigo Echeverría jugó íntegro el clásico de Huracán con San Lorenzo. El canterano azul es titular indiscutido y uno de los referentes del equipo.
Acción fatal: infortunada jugada le impide a exjugador de la U romper maleficio que se extiende por dos décadas
Autor: Redacción Soy Azul

Cumpliendo una actuación impecable en el mediocampo del equipo, Rodrigo Echeverría estuvo presente durante todo el partido en que Huracán empató a un gol con su rival más tradicional e histórico: San Lorenzo de Almagro.

El exjugador de Universidad de Chile nuevamente fue uno de los puntos altos del equipo del Globo, que visitaba el estadio Pedro Bidegain (Nuevo Gasómetro) tratando de seguir cosechando puntos que le permitan salir de la incómoda posición que lo tiene luchando por el descenso.

En un partido de trámite intenso y equiparado, Huracán se puso en ventaja a los 61′ con gol de Ignacio Pussetto, pocos minutos después de quedar con un hombre de más por la expulsión de Gastón Hernández. Con el marcador a su favor y conquistando una victoria como visitante en el Pedro Bidegain ante su rival clásico después de casi 22 años, llegaron los 10 minutos de tiempo agregado… y así la desgracia.

Con más ímpetu que fútbol, alentado por los 40 mil hinchas locales, San Lorenzo inclinó la cancha a su favor e hizo retrasar las líneas de Huracán. Cuando se cumplían 90+6, llegó la malograda jugada. Tras una pelota sucia que la zaga no logró despejar, sobrevino un remate a la entrada del área chica con destino de gol que Echeverría pudo bloquear con sus piernas (ver abajo video del cruce salvador del volante chileno). Pero el rebote lo capturó un jugador local, quien al momento de impactar el balón fue tocado torpemente por un defensor de Huracán, que le cometió penal sin que ni siquiera el juez necesitara consultar al VAR, pues varios alegaron falta previa.

El lanzamiento desde los doce pasos lo marcó Adam Barreiro, que desató la algarabía del público local, que ya se resignaba a caer en un clásico que no perdía como local desde diciembre de 2001. Un triunfo que para Huracán habría representado, además, un verdadero balón de oxígeno en su objetivo de alejarse del descenso. Y que para Rodrigo Echeverría habría sido otro motivo para ganarse el recuerdo eterno de la hinchada del Globo, quien ya lo tiene como uno de sus jugadores predilectos.

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